prostitucion infantil

Prostitución Infantil, un síntoma más de una sociedad enferma.

Dan escalofrío los datos sobre explotación sexual infantil mencionados por el Icbf al presentar el plan de acción para combatirla. A 31 de diciembre del 2006, el Instituto recibió 228 denuncias por prostitución infantil. A la misma fecha del 2007, los casos aumentaron a 310 y sólo en lo que va corrido del presente año, la cifra asciende a 73. Pero lo más angustiante es saber que cada vez es menor la edad de iniciación de niños y niñas en la explotación sexual. En el caso específico de la prostitución infantil, los clientes no son otra cosa que abusadores sexuales, con agravantes contemplados en la ley: acceso carnal abusivo con persona menor de catorce años, sancionado con penas de hasta doce años de prisión, pero además cometido en concurso con otras personas (los proxenetas) y si la víctima es un niño o niña menor de doce años, es otra circunstancia de agravación que puede elevar la pena de una tercera parte a la mitad... Claro que frente a un delito tan vil, cualquier pena suena irrisoria.Por supuesto que las tareas preventiva y represiva que se anuncian en el plan de acción del gobierno, son definitivas para impedir que se agudice el drama, pero cada vez cobra más fuerza la propuesta de penalización de los clientes de la prostitución. Ya la había hecho el Fiscal Iguarán y la aplica por ejemplo Suecia que impone sanciones a los compradores de sexo. Hay tres tendencias de política criminal frente a la prostitución: prohibicionista, abolicionista y reglamentarista. Prohibirla es utópico; abolir totalmente la prohibición es abrirle la puerta a la trata de personas y al abuso de menores; reglamentarla -como lo hace Colombia, que sanciona el proxenetismo (inducción a la prostitución) que es la actitud más extendida en las legislaciones del mundo- es considerado por las organizaciones de mujeres como una forma de perpetuar la explotación. Quienes impulsan la abolición cuestionan el calificativo de profesión más antigua del mundo y hablan de explotación más antigua del mundo y en cuanto a la supuesta autonomía de las prostitutas para "vender" su cuerpo, resaltan que en la práctica la prostitución, especialmente en Europa y Asia es controlada por organizaciones, incluso multinacionales, donde además la mayor cantidad de mujeres dedicadas a ese oficio son inmigrantes, casi siempre ilegales, lo que aumenta su condición de explotadas. Un país tan avanzado como Suecia cuenta desde hace 9 años con una ley que penaliza a los clientes, que se considera un camino adecuado para ir disminuyendo el problema. A mediados del año 2002 diversas organizaciones de mujeres que trabajan desde hace ya más de una década, tanto en programas de atención a mujeres prostituidas como en programas de denuncia de la violencia de género, optaron por aunar y coordinar esfuerzos a fin de transmitir de forma colectiva a la sociedad y elevar a los poderes públicos su postura divergente y contraria a cualquier forma de reglamentación u ordenación del mercado de la prostitución, por considerar que en todos los casos y circunstancias, constituye una de las modalidades más antiguas en que se manifiesta, asegura y perpetua la desigualdad entre hombres y mujeres y en que se manifiesta la violencia contra las mujeres. Así se constituyó la Plataforma de Organizaciones de Mujeres por la Abolición de la Prostitución. Su sitio en la web: www.aboliciondelaprostitucion.org